CRUCIFIJO


Por: Brad Scott
De: WildBranch Ministry

Traducido por: Dagmar Mora de Proyecto Benjamín


Esta sección estará dedicada a palabras de la Escritura y su significado. No sólo estableceremos las raíces etimológicas de estas palabras, sino que revelaremos cómo muchas palabras Españolas son de hecho palabras Hebreas. Todo y cada cosa que usted quisiera saber sobre el lenguaje Hebreo será discutido y presentado en esta sección.

Envíenos un e-mail si usted quiere saber que es una palabra en particular y estaremos felices de colocarla aquí para que todos lean. Si usted está interesado en eso, talvez muchos otros lo estén, también.


El símbolo tradicional de la mayor parte del cristianismo moderno, especialmente, la Iglesia Católica Romana, es el crucifijo. La historia de este símbolo y cómo vino a ser un símbolo es falaz en el mejor de los casos, y pagana en el peor. La palabra crucifijo sin embargo, puede ser rastreada de vuelta a sus raíces hebreas. La palabra de hecho es una combinación de dos palabras hebreas:

  1. qeras, que significa un gancho (Shemot (E'xodo) 26:6, 33) La palabra española en la Reina Valera es corchete (o atar) y

  2. safaj que significa juntar o unirse (Yeshayahu (Isaías) 14:1, Yob (Job) 30:7). Estas dos palabras se combinan para formar qerasaphach, o fonéticamente karahsahfak. ¡Díganlo a una! Karahsahfak. Finalmente a través de lenguaje Indo-Europeo llegó a ser crucifijo. La palabra española sufijo, que significa unir o fijar al final de una palabra, es un cognado de crucifijo.

Teológicamente, cuando el Mesías fue fijado al madero, el crucifijo fue el medio por el cual la profecía de la casa de Israel y la casa de Yehudah, juntándose, fue hecha posible, porque el Mesías fue el mediador del Nuevo Pacto como dice en Yeshayahu:

Yeshayahu 14:1
Porque YHVH tendrá piedad de Ya‘aqov [Santiago], y todavía escogerá a Israel, y lo hará reposar en su tierra; y a ellos se unirán extranjeros, y se juntarán a la familia de Ya‘aqov.

¡Shalom Aleijem!